Menos discurso y más exigencia

Buenos días.

A finales del pasado julio ugt publicó un comunicado sobre la primera reunión de la Comisión Interempresas de Igualdad. Cuentan que la empresa presentó los datos que siguen mostrando que los permisos por lactancia, excedencias y reducción de jornada, son utilizados mayoritariamente por mujeres… pero ninguna propuesta… ¡qué dos novedades!. A continuación califican de “reto trascendental y complejo” la aplicación de medidas de igualdad a las tres plantillas y “asumen” las competencias para cumplir los objetivos del Plan de Igualdad del CEV, nada menos que eliminar los obstáculos que impiden la igualdad real entre hombres y mujeres.

Para ello, dicen, “su primer objetivo es la conciliación de la vida personal y laboral”, proponiendo la generalización de la jornada continua flexible, el cumplimiento del compromiso acordado de implantar una aplicación para realizar la solicitud de Teletrabajo, el establecimiento de horas de conciliación compensables (flexibilidad para disminuir la jornada semanal en determinados períodos, por motivos relacionados con la conciliación, recuperando el tiempo en las jornadas siguientes) y la extensión e implantación del Modelo de TME de reducción de jornada a TdE y TSOL.

Lógicamente estamos a favor de estas medidas, pero consideramos que son peticiones tan mínimas que, por si solas, no conducen a gran cosa. Por ejemplo ¿de que servirá tener una aplicación en la que solicitar teletrabajo si pueden negártelo sin razones objetivas puesto que, entre otras cosas, no se ha establecido un catálogo de actividades o puestos susceptibles de aplicarles este modelo de trabajo? Imagina la cara que se te queda cuando la aplicación, por maravillosa que sea, te diga “su solicitud no ha sido aprobada”. O, respecto a las horas compensables ¿como se regula que la empresa no anteponga su ancestral y multiusos “por necesidades de servicio podrá denegarse…” ¿alguien cree que no será compatible con el “Plan Estratégico de Igualdad de Oportunidades” o cualquier otra ley/norma impulsada por el gobierno? Son temas que hay que hablar y atar antes de vender lo estupendo que es aquello que pedimos a la empresa.

Debemos recordar, en primer lugar, que hay casos judicializados por la falta de implantación del plan de igualdad, sin olvidar la evasiva y despectiva respuesta por parte de la mayoría sindical en los distintos CI a todo lo que plantilla y sindicatos han querido llevar a esos foros en relación a estos asuntos: la reducción del teletrabajo y la falta de recursos para decidir cómo gestionarlo –por no mencionar que el acuerdo que siempre refieren es inferior al mínimo “acuerdo marco europeo” (la conexión y el equipo corren a cargo de la persona teletrabajadora, una auténtica vergüenza)-, los turnos partidos implantados a discreción, la eliminación del complemento de tarde al acogerse a la reducción de jornada -la misma reducción económica en caso de reducción de jornada (CGT defiende que en caso de cuidado de personas la empresa asuma el coste económico)-, la dificultad para asistir a cursos presenciales fuera de jornada, nulas ayudas económicas sociales -eso si, para reembolso dental y vacaciones en el mar si hay dinero-, y sin olvidar a las Contratas y las jornadas draconianas a la que están sometidas las personas fuera de convenio, cosa que hace imposible a las mujeres promocionar en la empresa.

Creemos que la parálisis en las ‘concesiones’ de la empresa tiene que ver con que, una vez conseguido el CEV a la empresa le patinan estas ‘cosillas’, pero en el conjunto de los comités bajo el CEV es precisamente ugt la reinona absoluta, por lo que es también la principal causante, por inacción o incluso hostilidad, de los males que denuncian mientras continúan causándolos. El desprecio al que se entregan en los distintos comités, respecto a todo lo que no venga de su propio ombligo, contradice esas afirmaciones con las que llenan sus panfletos cargados de demagogia, tan grandilocuentes como vacuos, que alegremente llaman ‘comunicado’, convirtiéndolos en mera propaganda. Es una verdadera pena que esta estrategia sea tan favorable a sus intereses como organización y, además, inversamente proporcional a la repercusión positiva sobre las plantillas que lo hacen posible. Unas muestras:

– “La Igualdad debería ser un criterio, no solo inspirador, sino transversal. La igualdad es un principio jurídico universal y un derecho fundamental”. ¿Que proporción de mujeres tienen o han tenido históricamente en su ejecutiva?
– “Cada paso que demos en pro de la igualdad efectiva en las empresas del CEV será un paso adelante hacia una sociedad más justa”. ¿Y eso que hacen en los Intercentros, por ejemplo, con todos sus “tema ya tratado”, “se pasa a la comisión correspondiente” o “no es competencia de este comité” al tratar propuestas presentadas por otros sindicatos… son pasos adelante?
– “Asumimos nuestro rol como sindicato mayoritario en la defensa de los derechos laborales de todos y confiamos en que esta responsabilidad y respeto por los compromisos que firmamos sea igual para todos”. ¿Han oído hablar del lenguaje inclusivo o no sexista? ¿TodOs todOs? ¿Solo dOs?
– “Le toca a la empresa, a Telefónica, la mayor empresa de España, decidir si realmente quiere ir por ese camino, con valentía, o si prefiere ser una compañía poco comprometida, a la zaga de otras empresas mucho más audaces en la defensa de la Igualdad. En su mano está”. Está tan bien expresado que solo hay que sustituir ‘empresa’ por ‘sindicato’ y ‘Telefónica’ por ‘ugt’ para devolver la pregunta al mayor (o uno de ellos) sindicato de España. ¿De verdad es comprometido o audaz su comportamiento en los comités respecto a la igualdad? ¿En serio que no debieran elevar unos grados su temperatura de presión y exigencia a la empresa en ese sentido?

Si dicen que los avances se consiguen mediante un proceso propuesta-negociación-acuerdo-seguimiento ¿por que excluir a ninguna organización de una parte del mismo (negociación y acuerdo), puesto que proponer y hacer seguimiento es posible –y de hecho se produce, al menos desde CGT- sin tener presencia en la comisión? Efectivamente, mal camino para que Telefónica sea “referente social en términos de Igualdad entre hombres y mujeres”. Déjense de decálogos y de vender la moto, defiendan con ánimo y pasión verdadera aquello que promulgan, aunque para ello haya que presionar y exigir, que ya saben que no es incompatible con el dialogo, a pesar de que a menudo digan lo contrario para emponzoñar a otros sindicatos. Si van por esa senda ‘global’ (dialogo y presión, las herramientas obreras de siempre), para buscar el equilibrio entre las necesidades de conciliación de la vida laboral y familiar de los trabajadores y trabajadoras con las necesidades organizativas y de negocio de la Compañía, no estarán solos. Y hace mucho que lo saben.

No podemos dejar de comentar que, en esta comisión, no se ha presentado ningún caso de acoso laboral. Es curioso, especialmente en tiempos de PSI en los que, como en los anteriores ERE, se acostumbra a ‘apretar’ a la gente que puede acogerse pero es reacia a hacerlo. Quizá apretar no sea un eufemismo de acosar y, simplemente, es que se nos da mal este idioma.

Salud y libertad… ambas imposibles sin igualdad